Previsiones del mercado inmobiliario para el 2019
Con la llegada del año 2019, la situación de la vivienda en España se sitúa en una nueva fase del ciclo: la consolidación del crecimiento de los precios registrados en 2018. Tras haber superado la crisis inmobiliaria de finales de la década pasada, los precios han experimentado una gran recuperación. Además, se estima un incremento del número de ventas, que podrían superar las 600.000 unidades.
El mercado inmobiliario en Madrid y Barcelona, que inauguró su recuperación el pasado año 2016, sufrirá una moderación provocada especialmente por la incertidumbre política, las medidas de control de los Ayuntamientos y los niveles de precios alcanzados que podrían ya tocar techo.
Esta normalización en Madrid y Barcelona dejará paso al crecimiento de los precios en ciudades como Sevilla, Málaga, Palma, Tarragona o Valencia entre otras, que serán las que lideren el crecimiento del mercado de la vivienda este 2019. Ya durante el último trimestre del 2018 se registraron incrementos por encima del 15%. Además, los expertos prevén que el crecimiento registrado en dichas capitales, superará el 10% durante este año.
Por otro lado, para 2019 se estima un deterioro del esfuerzo financiero a la hora de acceder a una vivienda que sobrepasará el 35% de la renta familiar. Esto sucederá principalmente como consecuencia del incremento de los precios y los tipos de interés. Aun así, los expertos apuntan que la compraventa de viviendas aumentará hasta un 10% durante este nuevo año. Esto se verá reflejado también en el número de concesiones de hipotecas, cifra que se prevé que tendrá un incremento del 9%.
En conclusión, España continúa siendo un país de propietarios. Aunque el porcentaje de personas que viven en régimen de alquiler ha crecido, la inversión inmobiliaria sigue siendo la preferida por los españoles. La consolidación en Madrid y Barcelona abrirá paso al crecimiento en otras ciudades. Sin embargo, no habrá que perder de vista la tendencia alcista del Euribor. Las nuevas hipotecas a tipo fijo y las que se constituyeron a tipo variable experimentarán encarecimientos en la cuota a medida que se vayan normalizando los tipos de interés.
